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Combatir la humedad en las paredes de los hogares es una lucha que parece no tener fin. Además de ser antiestético, nos encontramos frente a un grave problema que afecta en mayor o menor medida a todo aquel que conviva con él. Para realizar un nuevo proyecto en el que tengamos que renovar la pintura de una estancia, es esencial tratar este problema y solucionarlo de forma definitiva.
¿Cómo erradicarlo?
Lo primero que debemos averiguar es el foco del problema. Si la pared es interior o exterior existen diferencias. Si la pared da al exterior, nos podríamos encontrar con que el aislamiento no es suficiente y necesita renovarse. Si por el contrario la pared se encuentra en el interior de la casa, es más probable que exista un problema de escape de agua o de tuberías. Además es muy común que las humedades dentro de los hogares tengan mucho que ver con la condensación.
Tipos de humedades
- Condensación
La humedad por condensación es una de las más comunes en los hogares. Se trata de una condensación generada dentro de la propia vivienda. Es en el caso de los vapores que se generan por las actividades que realizamos. Desde cocinas, el vapor de la ducha… hasta la propia respiración de las personas que viven allí.
- Filtración
Cuando el muro o pared no está bien impermeabilizado, nos encontraremos con filtraciones del exterior. También es muy común que la filtración provenga de una tubería rota o por causas meteorológicas.
- Capilaridad
Suele ser menos común que los anteriores, pero también se encuentra en muchos hogares. En este caso la humedad se produce a causa del espacio que encuentra a través de los cimientos de la casa. Sobre todo aparecerá como es más lógico en sótanos y garajes.
¡Adiós para siempre!
Paso 1. Lo primero que debemos hacer es limpiar la zona. En muchas ocasiones algunos profesionales trabajan y pintan sobre la superficie infectada. Lo cual es un gran error. Antes de comenzar con cualquier trabajo lo primero que debe hacerse es desinfectar la zona por completo y conocer la envergadura del problema. Para proteger el suelo de la estancia y las paredes te recomendamos echar un vistazo a nuestra gama de productos Coverpin, encontrarás todo lo necesario para que la zona de trabajo esté totalmente protegida contra rozaduras o restos de pintura.
Paso 2. Si es necesario y el problema es mucho mayor de lo que esperábamos, la solución será rascar la pared hasta llegar a la raíz del problema.
Paso 3. Si la zona que hemos tenido que rascar es bastante grande deberemos reparar la zona con una masilla. Si solo hemos tenido que limpiarla procedemos a aplicar la pintura antihumedad.
Paso 4. Y… ¡Por fin! Ya tenemos la zona totalmente desinfectada y limpia.
Consejos para evitar su reaparición
Para que este problema no vuelva a aparecer tan fácilmente, podemos llevar a cabo pequeños gestos que pueden ayudar a mantener la zona libre de moho.
- Las casas deben estar bien ventiladas.
- No se debe tender ropa dentro del hogar.
- Las zonas más húmedas como baños, cocinas deben tener una buena ventilación.
- Se deben aislar zonas o recovecos para no se introduzca la humedad del exterior.
Y si la humedad sigue llamando a la puerta… o mejor dicho a las paredes… lo mejor es consultarlo con un especialista. Seguramente el problema es mucho más grave de lo que parece.
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